(El 30 de junio de 2007 dos médicos de origen islámico del Sistema Nacional de Salud británico (NHS, por sus siglas en inglés) intentaron perpetrar atentados en Londres y Glasgow. Uno de ellos, Bilal Abdulá, especialista en diabetes que trabajaba en el hospital Royal Alexandra de la ciudad escocesa de Paisley y que durante el juicio fue descrito por sus colegas como un "médico extraordinario", se declaró culpable.)